El doble movimiento de la inculturación.
Cuando el Evangelio aterriza en una cultura, se produce un movimiento complejo de ruptura y continuidad. No hay inculturación sin transmutación cultural. Sin embargo, el cristianismo, como religión esencialmente dialogal, queda abierto a posibles novedades en su pensamiento y en su imaginario. La inculturación cambia el rostro histórico del cristianismo. Cuando entra en contacto con…